Llega el famoso Black Friday, ese día del año en la que te gastas por gastar.
Porque más allá de que tu cafetera nueva espume la leche y muela el grano, que esos vaqueros de oferta tengan un desgastado diferente a los que ya tienes o que esa nueva crema exfoliante con olor a papaya te prometa quitarte años de encima, ¿qué aportan estos productos a tu vida?
Una mejora momentánea, y ya está.
Vivimos en un bucle de consumo compulsivo: Compras un producto, te hace ilusión cuando llega, lo usas unos días… Hasta que te aparece un anuncio en redes sociales de una versión mejorada que te crea una nueva necesidad. Y vuelta a la rueda.
Ahora bien, este consumismo se acentúa todavía más en fechas como el Black Friday. Entonces, ¿por qué no nos sumamos a este día y hacemos descuentos?
Porque el Black Friday nos afecta más de lo que crees y no queremos fomentarlo.
En datos: el impacto del Black Friday en el medioambiente
Según los datos de Greenpeace, en el Black Friday de 2019:
- Se distribuyeron 3,5 millones de paquetes en toda España y 1,5 en Madrid (un día normal se distribuyen en torno a 350.000 – 400.000 paquetes en la capital).
- Se generó el 1,7% de las emisiones anuales de CO2 de Madrid – seis veces más que un día normal – por el transporte, el embalaje y la producción de los productos.
- Los artículos más vendidos fueron: moda (53%), calzado y complementos (39%), electrodomésticos, aparatos electrónicos, y teléfonos móviles (35%). Teniendo en cuenta que, solo para producir unos vaqueros, se necesitan 7.500 litros de agua, equivalente a lo que una persona bebe durante siete años.
Además, En EE UU se emitieron 15 millones de toneladas de CO2 solo por las devoluciones. Es decir, una contaminación igual que tres millones de coches rodando durante todo un año.
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Impacta, ¿verdad?
Es muy importante que tengas en cuenta las consecuencias de caer en este consumo desenfrenado. Tú solo haces un clic desde el sofá de tu casa, pero, sumado a otros clics, el impacto medioambiental es brutal.
En este breve vídeo de Greenpeace verás el impacto de la compra online para el planeta.
Y, si tienes 7 minutos, puedes mirar este reportaje de El País sobre El coste medioambiental de comprar por internet.
¿Te lo habías planteado alguna vez?
Más compras = Más residuos
Piensa: en un día normal, ¿cuántos residuos generas?
Seguramente, más de los que te gustaría.
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Pues, a todos estos residuos, añade los que se crean si todo el mundo compra a la vez en una fecha señalada como el Black Friday. Y sí, aunque solo compres un producto, mira lo que estás generando:
- Un residuo del producto que sustituyes por el nuevo.
- Los residuos del paquete de tu nueva compra (cartón, papel, plásticos, etiquetas, papel de regalo si ya lo pides envuelto, envoltorio de la empresa de transporte…).
- La contaminación del transporte para que ese producto llegue a la puerta de tu casa.
Ahora, párate a pensar, si esto es solo de un producto, ¿cuántas toneladas de residuos se generan en tu pueblo, en tu comunidad, en tu país y en el mundo con las compras masivas durante el Black Friday o la Black Week?
Y si, además del consumo innecesario, sumamos los arrepentimientos, las devoluciones y las reventas, la contaminación es desmesurada.
Compra menos, compra mejor
En Saponäria no hacemos Black Friday ni Black Week. ¿Por qué? Porque apostamos por un consumo consciente.
Pero, ¿qué puedes hacer tú? Te damos 3 consejos:
- Compra local. En vez de comprar a los grandes vendedores online, apuesta por los pequeños negocios. Y, si decides comprar online, te recomendamos escoger tiendas a las que puedas recoger tu pedido o que tengan puntos de recogida, para evitar las emisiones generadas por el transporte.
- Elige productos ecológicos y sin embalajes. Minimiza la contaminación con productos naturales, con ingredientes Km0, embalajes reutilizables, cajas adecuadas al tamaño del pedido, etc.
- Apuesta por la segunda mano. Intercambiar y reutilizar ayuda a alargar la vida útil de los productos. Te ponemos un ejemplo actual: el vestido de Wallapop que llevó la actriz Ana Fernández a la gala de Los40 Music Awards, una forma de concienciar sobre un uso más responsable de la moda. En este caso, volver a usar ese vestido en lugar de uno nuevo, suponía el ahorro de 1.702 litros de agua y la no emisión de 15kg de CO2.
Y, por último, pero lo más importante: piensa antes de comprar.
Valora lo que tienes, lo que necesitas y si vas a utilizar esa nueva adquisición. Te recomendamos recapacitar un mínimo de 15 días antes de hacer una compra de capricho. Si, pasado ese tiempo, todavía piensas que te hace falta, entonces cómpralo. O, si quieres aprovechar los descuentos, haz una lista de lo que realmente necesitas antes de comprar.
Recuerda que solo tenemos un planeta y el consumismo masivo lo está matando. Entre todos, podemos consumir de forma consciente y contribuir a que el planeta viva más años.
¿Te unes?